Tras un aumento histórico en el flujo de migrantes en la frontera entre México y Estados Unidos, el gobierno americano ha aclarado que el paso permanece cerrado por la pandemia y las autoridades continúan enviando a la mayoría de de regreso.
El presidente Biden pide a los migrantes abstenerse de cruzar la frontera estadounidense
Durante el mes de febrero más de 100 mil migrantes en situación irregular han sido arrestados en la frontera estadounidense, de los cuales cerca de 10 mil son menores solos. Algunos de ellos apenas tienen seis o siete años.
El Secretario de Seguridad Interior Alejandro Mayorkas ha reconocido que se trata de un nivel histórico y sin precedentes en los últimos 20 años, y las autoridades han advertido que esperan seguir viendo personas presentarse a la frontera y que seguramente harán más arrestos este año de los que se han hecho durante todo ese tiempo.
“No vengan”
Joe Biden ha sido categórico al enviar un mensaje a estos migrantes: “No vengan”, les ha dicho.
Aparentemente, la toma de posesión de Biden y su decisión de suspender las expulsiones de personas indocumentadas durante 100 días fueron interpretadas como señales de apertura.
De allí su aclaratoria y su pedido de paciencia para solucionar un problema que lleva años gestándose y que se profundizó duramente durante la gestión anterior.
Un plan en marcha
Mayorkas, quien llegó de Cuba a Estados Unidos siendo un bebé, hijo de unos padres que también buscaban el sueño americano, amplió los detalles de esta política:
“Estamos trabajando contrarreloj para resolver esta situación, estamos progresando y ejecutando nuestro plan. Tomará tiempo y no nos detendremos en nuestro propósito, manteniendo nuestros valores y principios como nación. Nuestra meta es lograr un sistema de inmigración seguro, legal y ordenado, basado en prioridades: mantener la frontera segura, atender el predicamento de los niños y permitir a las familias permanecer unidas”.
La mayoría de los migrantes son rechazados por las autoridades estadounidenses y devueltos a México y a sus países originarios, pero las estructuras gubernamentales encargadas de recibir a los menores de 18 años se encuentran abarrotadas.
El enfoque de la administración Biden implica algunas medidas que pueden ponerse en práctica de forma más rápida, y otras reformas que tardarán años en cristalizarse.
Por su parte, los republicanos han acusado a Biden de haber provocado una crisis migratoria, al tiempo que la izquierda lo señala por no ser suficientemente humanitario.
Y mientras tanto, las fronteras permanecen cerradas como medida de contención por la pandemia.
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Publicado el 18 de marzo de 2021.