ffiguera

Tengo entendido que quienes pertenecen o tiene papeles de la comunidad europea tienen mayores oportunidades de ingresara cualquier país dque pertenezca a este grupo. Pese a que los españoles le dan mayor prioridad a los naturales y/o nacionalizados de portugal, creo que no pierdes nada al intentar averiguar cuál es tu situación. Pero, eso debes hacerlo directamente con el Consulado de España en Venezuela. Aquí en este portal te ofrecen la dirección exacta de la dependencia diplomática.

Soy periodista aquí en Venezuela y veo con muchísima tristeza el pesimismo que demuestra la mayoría de los que escriben en este foro. Pese a las vivencias de Rosa y José, que lamentablemente se tornaron en una estéril discusión sobre quién sabe más sobre los inmigrantes de los años 50-60, y las experiencias del amigo que vive en Italia, creo que hay una buena cantidad de visitantes y lectores de este site que esperan que alguien brinde una perspectiva más animosa con respecto al hecho de emigrar o no.
En muchas cosas, todos los que asentaron sus opiniones acá tienen razón. Pero, en otras, no. Alguno hablaba de que muchos españoles no sienten confianza por los extranjeros. Luego les daré un dato que demuestra que eso no es tan así…
Toda decisión que implique marcharse del país nativo y probar suerte en otras latitudes implica temor e incertidumbre, y por supuesto una enorme cuota de sacrificio. Por ello, no se pueden tomar las experiencias de cinco personas como un mapa fidedigno de la forma de vida y de relaciones entre los inmigrantes venezolanos y los habitantes naturales en España.
Creo que algunas cosas en la vida requieren mucha fe y constancia. Espero que Wilmy y Claudia encuentren de esa suerte que han decidido probar en Barcelona, han hecho un enorme esfuerzo al llegar allá y creo que se lo merecen. De hecho, estoy seguro que les irá bien. Y a todos ustedes, que de alguna manera esperan unas palabras de aliento para decidirse a intentar algo por mejorar su calidad de vida o sus perspectivas académicas y profesionales, aquí van las mías: el peor intento es el que no se hace. Si la meta es llegar a España, es posible lograrlo. Además, y eso tienen que reconocerlo todos, somos un tanto como de 50% de españoles. Hay muchas más cosas que nos vinculan con ese país, que las que nos pueden separar: hablamos el mismo idioma, ¿o no? Nuestra historia, costumbres y gastronomía provienen en gran medida de allá, pasamos por un proceso de colonización de más de trescientos años y pese a que logramos nuestra independencia hace unos doscientos, nunca hemos dejado de sentir a España como la Madre Patria.
Muchos españoles quizás se refieran a nosotros de manera despectiva –sudacas, nos dirán algunos, por ejemplo- pero sé que hay otros muchos que aman a Latinoamérica y sienten mucho cariño por su gente. Así que no metamos a todos en el mismo saco, por que con ello estamos haciéndoles lo que odiamos que nos hagan, es decir, encasillarlos.
El primer aspecto que hay que digerir es que, si se quiere llegar a España, hay que olvidar que los comienzos van a ser fáciles, se debe luchar por conseguir un puesto en esa sociedad así como hicieron muchos inmigrantes españoles en su época aquí en Venezuela. Miren los resultados: hoy son una de las colonias más prósperas del país, y sus integrantes son tan bien identificados y queridos como cualquier venezolano.
El dato que les ofrecí al principio: Hace unos días, vi un reportaje en el telediario matutino de Televisión Española (TVE). En él se realizó una encuesta a un buen número de españoles acerca de qué opinaban de dar trabajo a los inmigrantes: más del 70% de los españoles entrevistados aseguraban sentir más confianza y simpatía por los latinoamericanos y europeos, que por los marroquíes (una de las más grandes comunidades de origen foráneo en la península ibérica). También aseguraban que no tendrían problemas en darnos empleo, siempre que tuvieramos nuestros permisos de trabajo en regla. Y esto es algo lógico, ¿no es así?
Lo importante es, si te encuentras en Venezuela, planificar bien lo que vas a hacer, pedir toda la información posible para tener el éxito deseado y realizar los tramites que exigen las autoridades laborales. Luego de esto, no creo que exista ninguna oportunidad de fallar… pero si después de tanto batallar, no consigues lo que has querido, que no se diga que no lo intentaste. Espero que consideren estas humildes palabras de un venezolano que, al igual que muchos, espera que seamos aceptados y reconocidos en el exterior, por todo lo que sé que valemos.

¡¡¡Ánimo y suerte para todos!!!