Barack Obama
Obama se despidió de la Casa Blanca y dejó detrás un tortuoso camino andado para intentar realizar una reforma migratoria en Estados Unidos. Fue una tarea ardua y fallida.

Obama usó el poder ejecutivo para proteger a los extranjeros más vulnerables

¿Cómo podría evaluarse el liderazgo de Obama para la promoción de una modificación integral del sistema de inmigración estadounidense?

Retrospectiva de la lucha de Obama por los inmigrantes

En su emotivo discurso de despedida, pronunciado en Chicago, el 10 de enero de 2017, el saliente presidente de Estados Unidos, Barack Obama, realizó un llamado al respeto de los inmigrantes: «Si no invertimos en los hijos de los inmigrantes, solo porque no se ven como nosotros, minimizamos el futuro de nuestros hijos».

Unas semanas antes, en su última gira internacional como presidente, Obama se expresó en los siguientes términos ante un grupo de estudiantes en Lima, Perú:

«América es un país de inmigrantes. Ese ha sido su punto fuerte. Hemos podido atraer talento de todos lados. Si ustedes van por las calles de Luisiana, de Indianápolis, verán que hay gente que viene de todas partes.

Salvo los pueblos nativos, todos los demás somos inmigrantes en América. Y eso tiene muchas cosas positivas».

La defensa a la inmigración y el llamado a la tolerancia fueron, sin duda, de las principales tareas que ocuparon al mandatario.

El largo camino andado para lograr una reforma migratoria en Estados Unidos fue arduo, difícil, de gran impacto para la administración Obama, y, lamentablemente, fallido.

Sin embargo, Obama empleó el poder ejecutivo para remendar el sistema lo mejor que pudo, amparando a los «Dreamers» y protegiendo temporalmente a hasta cinco millones de personas de la amenaza de la deportación.

¿Fueron suficientes los esfuerzos de Obama para proteger a los extranjeros sin papeles? ¿Cómo podría evaluarse su liderazgo para la promoción de una reforma migratoria integral en los Estados Unidos?

Analicemos la política migratoria de Obama en retrospectiva.

Así fue la lucha de Obama por la reforma migratoria

Durante sus dos períodos presidenciales, Obama sostuvo con gran firmeza la bandera de la reforma migratoria, con énfasis en la legalización de 11 millones de extranjeros indocumentados, la mayoría de los cuales son de origen hispano o latinoamericano.

Sin embargo, ni la amnistía ni el resto de las reformas profundas al sistema migratorio estadounidense prosperaron.

En el primer período (2008 – 2012), cuando contaba con mayoría parlamentaria, Obama dio prioridad a otros temas de interés nacional, como la reforma integral al sistema de salud, conocido como el “Obama Care”.

Hitos de la fallida reforma migratoria de Obama.
Hitos de la fallida reforma migratoria de Obama.

En el segundo período (2012 – 2016), sin mayoría parlamentaria, la reforma migratoria encontró la férrea resistencia republicana en la Cámara de Representantes. Incluso, a pesar de que el 27 de junio de 2013, el Senado aprobó un proyecto bipartidista que incluyó una vía para la regularización de los sin papeles.

Semanas después, la propuesta no contó con el apoyo en la Cámara de Representantes, donde el documento quedó varado.

Los puntos principales de la reforma migratoria integral que propuso Barack Obama pueden resumirse de la siguiente manera:

Legalización de indocumentados

El proceso suponía un beneficio para los ciudadanos extranjeros  en Estados Unidos en condición de indocumentados, sin antecedentes criminales, con manejo del idioma inglés o con interés en aprender el idioma.

Los beneficiarios hubieran debido pagar una multa. Una vez legalizada su situación, estos ciudadanos podían adquirir la ciudadanía estadounidense luego de cinco años de estadía continua en el país.

Dream Act o Ley Dream

Se trató de una propuesta para la legalización de los jóvenes indocumentados que llegaron siendo niños a Estados Unidos llevados por sus padres en condición de ilegalidad y que crecieron y se educaron como estadounidenses, pero carecen de un estatus legal.

Estos jóvenes indocumentados, que se les conoce como los “dreamers” (soñadores), eran sujetos de deportaciones hasta que, el 15 de junio de 2012, Obama aprobó la “Acción Diferida para los Llegados en la Infancia” (Deferred Action for Childhood Arrivals), con la cual se frenó de manera inmediata la salida forzada.

De acuerdo con la política de Acción Diferida, todos los jóvenes entre 15 y 31 años, que estén en proceso de deportación o tengan una orden final de remoción o de salida voluntaria, pueden solicitar una consideración para la Acción Diferida que impediría la deportación por dos años, con posibilidad de renovar el lapso.

La medida, sin embargo, no otorga estatus legal al beneficiario.

En la propuesta migratoria de Obama, la protección para estos jóvenes iba a ser ampliada y tendría carácter de ley, la “Dream Act” o Ley Dream, que buscaría crear una vía para otorgarles la legalidad.

Los beneficiados podían obtener una residencia temporal,  con la idea de que cursen al menos dos años de estudios superiores tras finalizar la escuela secundaria o bien sirvan en el ejército.

Una vez transcurridos 5 años desde la concesión de la Green Card o residencia temporal, se solicitaría que la residencia se convierta en permanente, abriéndose así el paso hacia la ciudadanía.

Seguridad

El reforzamiento de los controles de seguridad en la frontera estadounidense siempre fue parte de la reforma general. Buscaba erradicar el paso de indocumentados y fortalecer la lucha contra las mafias del narcotráfico en México.

Otra medida más específica consistía en incluir presupuestos adicionales para mejorar la infraestructura y las condiciones de las patrullas fronterizas estadounidenses y de los puertos de entrada al país.

Ampliación de la cuota anual de visas de inmigrante

Obama recomendó el aumento del número de las visas de inmigrantes que concede el Departamento de Estado, con el fin de reducir el tiempo de espera para la reunificación familiar, actualmente calculado en dieciocho años, y agilizar el proceso para convertirse en residente permanente o ciudadano estadounidense.

Implantación de un sistema de puntos

La propuesta pretendió emular el sistema migratorio que poseen Canadá y Australia, en el que se evalúa al candidato de acuerdo con una serie de requisitos, cuyo cumplimiento le otorga puntos.

El sistema iba a comprender una escala de cero a cien puntos. Los criterios que se hubieran manejado hubiesen sido ocupación y empleo, educación, manejo del idioma inglés, comportamiento cívico, número de hijos y oferta de trabajo, entre otros.

Revisión de las políticas de redadas y deportaciones

El presidente señaló muchas veces la necesidad de revisar las políticas del Departamento de Seguridad Nacional, como las redadas y las deportaciones, pues resultan ineficaces, pero altamente lesivas para la moral de muchas familias de inmigrantes.

Hitos de la fallida reforma migratoria de Obama

Aunque el presidente Obama sostuvo muchas veces su compromiso con la realización de cambios importantes en el sistema, fue duramente criticado por agrupaciones de defensa de los derechos de los latinos y líderes comunitarios que se sintieron defraudados ante el nulo avance del proceso durante la primera gestión del presidente.

Durante la administración de Obama se deportaron unos 2.7 millones de extranjeros sin papeles.
Durante la administración de Obama se deportaron unos 2.7 millones de extranjeros sin papeles.

Sin embargo, no pueden olvidarse varios hitos importantes de la gestión Obama en materia migratoria.

Por ejemplo, se opuso vigorosamente a la Ley de Arizona, que obliga a la policía a controlar el estatus migratorio de los detenidos en base a una “sospecha razonable” de que son indocumentados.

Se describen a continuación otros momentos claves o hitos de la reforma migratoria sucedidos durante los dos períodos presidenciales de Obama (de 2008 a 2016):

La Acción Diferida – 15 de junio de 2012

El 15 de junio de 2012 comenzó a aplicarse la llamada “Acción Diferida para los Llegados en la Infancia” (Deferred Action for Childhood Arrivals) con la cual se frenó de manera inmediata la deportación de los “Dreamers”.

De acuerdo con la política de Acción Diferida, esos jóvenes indocumentados entraron en una condición de protección por dos años, con posibilidad de prórroga, lapso en el cual no pueden ser deportados.

Aunque la medida no confiere un estatus legal, todos los jóvenes entre 15 y 31 años en proceso de deportación o con una orden final de remoción o de salida voluntaria, pudieron solicitar una consideración para la Acción Diferida, que habría impedido de manera inmediata la salida del país.

Además, el presidente Obama se comprometió a crear la vía para que los “Dreamers” obtuvieran la nacionalización, a través de la Ley Dream o Dream Act.

El histórico discurso de Barack Obama – 29 de enero de 2013

En la multicultural ciudad de Las Vegas, Nevada, donde se calcula que viven casi 800 mil hispanos, Obama pronunció un histórico discurso, el 29 de enero de 2013, que representó el empuje definitivo para el avance del trabajo bicameral del «Grupo de los Ocho».

Durante su discurso, Obama aseguró que pondría todos sus esfuerzos en el logro de la reforma migratoria estadounidense.

Sus palabras quedaron recogidas en la siguiente lista de las más importantes frases que pronunció:

“Estoy aquí, porque ha llegado el momento para una amplia y sensata reforma migratoria. El momento es ahora.”

“Es importante que reconozcamos que la base para un acción bipartidista ya existe.”

“Si el congreso no puede avanzar a tiempo, yo les enviaré un documento con mis propuestas e insistiré en que lo sometan a votación inmediatamente.”

“Necesitamos que el Congreso actúe de una vez por todas para dar una solución ya a los inmigrantes indocumentados.”

«Tenemos a 11 millones de hombres y mujeres que han vivido en las sombras, quizás entraron ilegalmente, quizás se quedaron con un visado caducado, pero viven aquí y contribuyen con sus comunidades.»

“Todos los días (los indocumentados) intentan ganarse la vida y puede que trabajen con menos sueldo del que merecen. Eso es malo para ellos, pero también para nosotros.»

“Hay que sacar esa economía sumergida a la luz. Es puro sentido común.”

“Debemos asegurarnos de que cada empresa y cada trabajador en Estados Unidos juegue con las misma reglas.”

“Si de verdad estamos comprometidos con fortalecer la clase media, debemos aprobar esta reforma.»

Histórica aprobación del Senado del proyecto de reforma  – 27 de junio de 2013

En enero del 2013, un grupo de senadores reformistas, demócratas y republicanos, conocidos como el Grupo de los Ocho, presentó un documento de reforma con cuatro ejes esenciales: seguridad fronteriza, regularización de los sin papeles, verificación del empleo y creación de nuevas visas.

La propuesta de reforma migratoria de Obama no logró el apoyo del Congreso.
La propuesta de reforma migratoria de Obama no logró el apoyo del Congreso.

El 27 de junio, en una jornada que fue calificada de histórica, la iniciativa fue aprobada por el Senado, con 68 votos a favor y 32 en contra.

Semanas después, el documento encontró la oposición republicana en la Cámara de Representantes, donde el documento encuentró un letargo del cual nunca salió.

La aprobación del Senado el 27 de junio de 2013 se considera el mayor avance alcanzado para la reforma y el documento bipartidista presentado es, hasta la fecha, el documento mejor logrado sobre la materia.

Los ejes de la reforma integral contenidos en el documento bipartidista, llamado en inglés “Outline of the Border Security, Economic Opportunity and Immigration Modernization Act of 2013”, que quedó paralizado en el Congreso, destacaba varios ejes fundamentales de acción que se pueden resumir en los siguientes puntos:

  • El fortalecimiento de la seguridad en las fronteras de Estados Unidos. El plan recomendaba aumentar la vigilancia en la frontera sur de Estados Unidos para impedir el 90% del cruce indocumentado. Para ello, se señalaban los puntos en la frontera que registran más de 30 mil detenciones por año y se les clasifica como “zonas de alto riesgo”, donde la seguridad debería ser fortalecida. Se preveía un presupuesto de 3 mil millones de dólares para mejorar la tecnología de seguridad y contratar más agentes de la Patrulla Fronteriza y otro tipo de personal.
  • La nacionalización de los indocumentados, calculados en 11 millones de inmigrantes. Para la legalización de los ciudadanos sin papeles se requeriría reunir una serie de exigencias, como demostrar que el solicitante se encontraba en Estados Unidos antes del 31 de diciembre de 2011, pagar una multa que podría establecerse en 500 dólares, pagar impuestos y pagar todos los cargos administrativos de la tramitación de la solicitud. Asimismo, quedarían excluidos de la moratoria los ciudadanos con antecedentes penales en Estados Unidos.
  • Eliminación del Programa de Visas de Diversidad, conocido como Lotería de Visas de Estados Unidos.
  • Liberación de los límites anuales para otorgamiento de visas de trabajadores calificados. El proyecto aumentaba notablemente el porcentaje de visas de empleo para trabajadores calificados y profesionales. Profesionales con títulos en profesiones de alta demanda en Estados Unidos (en ciencia, tecnología, ingeniería, matemáticas y otras áreas) y que tengan una oferta de empleo en un área relacionada con sus estudios o profesión, tendrían mayores probabilidades de obtener una visa de trabajo permanente.
  • Se crearían nuevas categorías de visas como la visa de mérito, para personas con talentos profesionales y familiares en Estados Unidos; la visa “W”, para trabajadores no especializados con ofertas de trabajo en Estados Unidos; o la visa de trabajador agrícola temporal, que permitiría la entrada temporal de contingentes de trabajadores para realizar labores del campo. El programa de Visas H1-B para profesionales extranjeros vería ampliada su cuota anual de 65 mil a 110 mil, y de 20 mil a 25 mil para profesionales graduados en universidades estadounidenses.
  • Obligatoriedad del E-Verify. El actual sistema de verificación de empleo (denominado E-verify) que permite a las empresas estadounidenses saber si un trabajador reúne las condiciones legales para trabajar, se volvería obligatorio en el proyecto de reforma. Los empleadores con más de 5 mil empleados deberían integrarse en un plazo de 2 años, y los que cuenten con más de 500 empleados tendrán un plazo de 3 años. El resto tendría un plazo de cuatro años, incluyendo los trabajadores agrícolas.
  • Uso de una tarjeta biométrica de autorización de trabajo y el empleador debería certificar que la fotografía presentada por su empleado coincide con la fotografía almacenada en el sistema federal.

El discurso del estado de la Unión – 28 de enero de 2014

El 28 de enero de 2014, durante su quinto discurso sobre el estado de la Unión, el presidente Barack Obama realizó un nuevo llamamiento a los congresistas para aprobar una reforma completa del sistema migratorio.

«Es hora de responder al llamamiento de nuestros líderes empresariales, sindicales, espirituales y de cumplimiento del orden público y realizar una reforma migratoria completa».

El presidente recordó que la reforma migratoria estimularía la economía y reduciría el déficit “en casi 1.000 millones de dólares en las próximas dos décadas”.

“Cuando las personas vienen aquí a hacer realidad sus sueños (estudiar, inventar y contribuir a nuestra cultura), hacen que nuestro país sea un lugar más atractivo para las empresas para encontrar y crear trabajos para todos”, señaló el presidente.

«Consigamos este año aprobar una reforma migratoria», enfatizó.

Medida ejecutiva para impedir deportaciones: 20 de noviembre de 2014

El presidente Barack Obama anunció una medida ejecutiva migratoria para proteger de la deportación a más de 5 millones de indocumentados, de los casi 11 millones que viven en Estados Unidos.

La decisión fue anunciada el 20 de noviembre de 2014 y se le considera el más importante beneficio a favor de los indocumentados en Estados Unidos desde la reforma migratoria del presidente Ronald Reagan, en 1986, que permitió la legalización de 3 millones de extranjeros sin papeles.

Los puntos principales puede resumirse de la siguiente manera:

  • Protección contra la deportación para padres de ciudadanos estadounidenses o de residentes permanentes establecidos en Estados Unidos antes del 1 de enero de 2010.
  • Ampliación de la Acción Diferida para permitir la protección de los “Dreamers” que entraron a Estados Unidos antes de cumplir 16 años de edad y han permanecido en el territorio estadounidense desde antes del 1 de enero de 2010, independientemente de la edad que tienen hoy.
  • Deportación acelerada a indocumentados que han cometido delitos criminales.
  • Deportar de manera inmediata a quienes traten de ingresar ilegalmente al país.
  • Negar la protección de la deportación a indocumentados que facilitado la entrada de otros sin papeles.
  • Negar la protección contra la deportación a los indocumentados que cometan fraude en el proceso de solicitar amparo.

Cortes frenan acción ejecutiva para detener deportaciones – 16 de febrero de 2015

El 16 de febrero de 2015, un juez federal de Texas dictó una medida cautelar que ordenó la suspensión de la entrada en vigor de la acción ejecutiva de Obama para frenar las deportaciones y extender la protección los «Dreamers».

La decisión judicial obedeció a la denuncia que presentaron unos veintiséis estados gobernados por el Partido Republicano, fundamentada en la «falta de autoridad del presidente».

La medida fue apelada por el gobierno de Obama, ante una corte federal de distrito, ante la Corte Federal de Apelaciones del 5to Distrito en Nueva Orleans y en última instancia ante el Tribunal Supremo.

La decisión aún está pendiente y las deportaciones de ciudadanos sin papeles se siguen produciendo en varios estados de Estados Unidos.

El discurso del estado de la Unión – 12 de enero de 2016

En su último discurso sobre el estado del país, Barack Obama mencionó brevemente el tema, asegurando que “hay que reparar el sistema”.

Conoce la política migratoria del presidente Donald Trump aquí