«Es mucha la oferta de empleo que se encuentra en Canadá».
Profesión: Ingeniero Industrial
Edad: 38 años
Ciudad/ País de origen: Bogotá, Colombia.
Fecha de salida: marzo de 2004
Ciudad/ País de destino: Montreal, Canadá.
Testimonial de migración Sergio Bernal desde Montreal, Canadá
¿Por qué te fuiste de Colombia?
Para buscar mejores posibilidades de desarrollo y futuro para los hijos.
¿Qué fue lo más difícil de la decisión?
Lo más difícil de la decisión fue dejar la estabilidad económica que tenía en ese momento. Los pros eran la certeza de encontrar grandes probabilidades de desarrollo, vivir en un país industrializado y darles a los hijos la oportunidad de aprender una tercera lengua.
¿Por qué seleccionaste Montreal como ciudad de destino?
El primer paso fue decidir a qué país emigrar. Así que escogimos Canadá por tratarse de una nación multicultural y con puertas abiertas a los inmigrantes.
En segundo lugar, tuvimos que seleccionar la provincia y la ciudad, por lo que elegimos Quebec-Montreal, gracias a la ayuda de SEDAV-Canadá, firma que nos mostró con detalles las ventajas que podríamos encontrar aquí y la facilidad del proceso para obtener la visa por la provincia de Quebec, versus la dificultad del mismo a través de las provincias anglófonas.
Describe los primeros tiempos
Creo que la respuesta en esta sección depende mucho de las características de cada persona. Primero que todo, hay que venir con la convicción de que las cosas no van a ser del todo fácil, ni se van a dar de un día para otro. Se requiere paciencia y mucha constancia.
Considero que nosotros nos hemos adaptado fácilmente, pues SEDAV nos mostró las opciones que cumplían con nuestras expectativas sobre el lugar donde queríamos vivir y nos orientó en los trámites para lograr una rápida instalación.
Una vez acomodados en nuestra casa, el país o la provincia cuenta con todos los medios para ayudar a los inmigrantes y hay la disposición a colaborar en todo sentido. Además, como en todo el mundo, si uno es amable y respetuoso con la gente, igual esta se comporta con uno.
Es fácil desenvolverse en inglés o en francés. Incluso se llega a encontrar mucha gente que también comprende el español. Canadá tiene sus propios problemas; pero nunca comparables con los que existen en los países subdesarrollados.
Por lo tanto, no se pueden hacer comparaciones entre lo que teníamos y lo que encontramos, son magnitudes y circunstancias totalmente diferentes.
Describe tu situación actual
Es mucha la oferta de empleo que se encuentra en Canadá, pero hay que estar dispuesto a arrancar desde abajo, mientras la gente confirma tu capacidad de adaptación y desarrollo en el mercado laboral canadiense.
Yo tardé nueve meses en conseguir una oferta de empleo que se amoldara o tuviera similitud con los cargos desempeñados en Colombia, pero al fin se dio y se va desenvolviendo con éxito.
Mi esposa realizó los cursos de francés que ofrece el Estado, unos con retribución salarial; otros no, y ahora desarrolla un proyecto para la creación de una microempresa.
Nuestros hijos están en su colegio, el cual también ha contribuido a su realización con buenos resultados académicos y a su integración a la sociedad. Por nuestra parte, el tener una actividad deportiva nos ha facilitado el ingreso en la sociedad «quebecois», la cual nos ha recibido con los brazos abiertos.
¿Cómo ha sido su experiencia con la firma SEDAV ? ¿Recomendaría sus servicios?
SEDAV ha estado con nosotros desde el comienzo de los trámites y siempre nos tuvo al tanto de lo que pasaba durante el proceso de solicitud de la visa, hasta el día en que la recibimos.
Después nos ayudó a ubicar los hoteles para nuestro arribo y, por último, nos acompañó hasta que cumplimos todos los requisitos y exigencias para poner los papeles al día. Siempre están ahí, para dar una mano cada vez que uno los necesita, en la medida de sus capacidades.
Yo recomendaría a los interesados que contraten sus servicios, en especial si hablamos de gente que no tiene contactos de ninguna clase en Montreal, como era el caso nuestro, que ni siquiera conocíamos la ciudad.
¿Te arrepientes de la decisión? ¿Qué harías distinto si pudieras repetir la experiencia?
No me arrepiento de la decisión y lo único que haría diferente, si tuviera que repetir la experiencia, sería emprenderla más joven, pues son aún mejores las oportunidades y uno está más dispuesto a correr los riesgos.
Testimonio publicado al 19 de septiembre de 2005
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