Otto Pierre, diseñador gráfico desde Toronto, Canadá

Toronto

«Las oportunidades están en todas partes».

Profesión: Diseñador Gráfico
Edad: 35 años
Ciudad/ País de origen: Caracas, Venezuela.
Fecha de salida: Septiembre, 1997
Ciudad/ País de destino: Toronto, Canadá.

Testimonial de migración Otto Pierre desde Toronto, Canadá

¿Por qué te fuiste de Venezuela?

Luego de haber vivido de adolescente fuera de Venezuela (en Canadá y Estados Unidos), por aproximadamente siete años, siempre tuve la inquietud de regresar como adulto y hacer mi vida por estos lados.

¿Qué fue lo más difícil de la decisión?

Siempre tuve la confianza de que me iría bien, así que para mí no fue difícil tomar la decisión.

¿Por qué seleccionaste Toronto como ciudad de destino?

Vivir en Ottawa, Canadá, con mis padres y mi hermana realmente fue una experiencia como ninguna otra. Además del idioma, aprendí muchas otras cosas acerca de la gente y cultura de este país.

La idea de regresar algún día siempre estuvo presente, así que, un buen día, busqué la planilla en la Embajada de Canadá en Caracas y comencé el proceso para tramitar la visa de residente. Por otro lado, Toronto siempre me atrajo por ser una ciudad grande y multicultural.

Describe los primeros tiempos

Comenzar siempre es difícil. Afortunadamente no estaba solo cuando me vine. Yo emigré con mi pareja y él también procesó su visa de residente por separado. Tuvimos mucha suerte de que nos saliera a los dos y que pudimos venirnos al mismo tiempo.

La adaptación para mí fue bastante rápida, pero a él le costó más, especialmente porque no tenía el idioma y era la primera vez que vivía fuera de Venezuela. Al principio vivimos en un apartamento bien pequeño, por un año y pico.

Yo comencé dando clases de español en un instituto y haciendo algunos trabajos a destajo en diseño gráfico, mientras que mi pareja tuvo que empezar por tomar clases de inglés. Al cabo de un año, aproximadamente, los dos conseguimos los trabajos que desempeñamos actualmente.

Describe tu situación actual

Tengo dos años y medio trabajando en una editorial, diseñando revistas y programas para las salas de teatro y conciertos de Toronto, así como eventos deportivos. Mi pareja es arquitecto y para él ha sido más difícil encontrar trabajo en su área, debido a las restricciones que existen para arquitectos graduados fuera de Canadá.

Él trabaja para una empresa que manufactura y comercializa muebles modulares de oficina. No son los trabajos ideales, pero nos han dado la posibilidad de mudarnos a un mejor apartamento y disfrutar de otras muchas cosas. De hecho, pensamos comprar apartamento o casa para el año que viene.

Por otra parte, algo de lo que hablamos siempre mi pareja y yo es lo diferente que significa tener amigos acá. La gente tiene la disposición, pero, por alguna razón, la amistad no llega más allá de lo que uno quisiera. Siempre existe alguna barrera o incomodidad de parte de ellos.

Se sienten extraños cuando uno les da un abrazo, ni hablar de saludarles con un beso como lo hacemos en Venezuela. No es que sea mejor ni peor, simplemente es diferente. Yo diría que esto ha sido lo único que nos ha afectado. Al final uno se acostumbra y se adapta.

¿Te arrepientes de la decisión? ¿Qué harías distinto si pudieras repetir la experiencia?

Yo me siento muy bien acá y, aunque extraño a la familia y amigos, no me arrepiento de haberme venido. El año pasado tuve la oportunidad de ir de vacaciones a Venezuela y confirmé mi decisión aún más (aunque no dejé de pasarla bien y sentirme muy a gusto los diez días que pasé allá).

Si pudiera repetir la experiencia, no haría nada distinto. Para algunos, adaptarse resulta ser bien difícil, pero nuestra transición e incorporación a esta sociedad fue bastante suave. Pienso que lo importante es no llegar con expectativas muy altas y estar consciente de que no nos están esperando acá con un trabajo.

También mantener una mente abierta, ser flexible, tener paciencia y una actitud positiva. Las oportunidades están en todas partes y hay que saber aprovecharlas.

¿Piensas volver a Venezuela?

No creo que regrese para vivir, pero seguro de vacaciones.

Testimonio publicado al 4 de agosto de 2001

 

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