¿Adaptarse o auto-segregarse?

¿Cómo comenzar?
Antes de venir a Canada debes informate con rigor, usando fuentes serias y confiables. Leer con avidez. Comunicarse con personas educadas que viven en Canadá.
La idea es minimizar el IMPACTO de la nueva sociedad. No llegar desprevenido, «soprendiéndote» o peor, criticando cada cosa que veas. La adaptación debe comenzar mucho antes de llegar.

¿Qué es adaptación?
Se trata de conocer con anticipación y adoptar modos, costumbres y actitudes propias del país, para que «encajes» en la sociedad y dejes de sentirte todo el tiempo como «extranjero».
Conlleva también a DEJAR ATRAS, olvidar, ciertos usos y mañas de tu propio país que NO SON BIENVENIDAS ni ACEPTADAS en Canadá.
El IDIOMA es fundamental para la adaptación. Si no lo dominas antes de llegar, pues, es lo primero a lo que deberías dedicarte.
Se debe INTERNALZAR que vives en una sociedad DISTINTA a la tuya nativa.

Es importante destacar que la adaptación NO SIGNIFICA renunciar a tu tradición, música, comida e idioma. En mi caso, mi lema es «venezolano en casa, canadiense afuera». Ha sido clave en nuestro éxito como familia venezolana en Canadá.

Tampoco implica abandonar a los connacionales, sino compartir con gente positiva, ya ADAPTADA, que tenga una visión optimista de la vida en Canadá. Nada más tóxico que encontrarse gruñones quejumbrosos o latinos acomplejados.
La adaptación significa EQUILIBRIO entre tus costumbres originales y la nueva sociedad para no sentirte fuera de lugar.

Riesgos de NO adaptarse.
Llegar a Canadá y quedarse sumergido entre grupos de compatriotas es muy negativo para la adaptación.
El gregarismo (convivir exclusivamente con connacionales) termina llevando a la AUTO-SEGREGACION, que es separarse, distanciarse, de los canadienses por voluntad propia, no adaptándose y menos integrándose. A regañadientes medio aprenden algo del idioma. Los gregarios no salen de la nostalgia de su país, se sienten incómodos y terminan detestando al país.

Los gregarios no buscan el EQUILIBRIO necesario. Se quedan en su mundo, en su cultura. Son perennes extranjeros, aún si se nacionalizan. Nunca se «canadianizan».

Los gregarios son cerrados. Sueñan con «traerse su país a Canadá», lo que a veces choca con la cultura canadiense. Esperan que los «canadienses se adapten a ellos» y se quejan. Algunos caen en la categoría de LLORONES, que culpan a los canadienses de «discriminarlos», cuando en realidad son ellos los que se auto-segregan, se auto-excluyen de la sociedad en la que viven.

RECOMENDACION:
Si viene a Canadá CAMBIE el software en su cabeza. Adáptese o mejor quédese.