Acerca de vivir en España

Hace sólo unos días comencé a leer los foros con temáticas sobre la inmigración de argentinos y me he llevado una gran sorpresa.
Quiero previamente aclarar mi situación personal, ya que inevitablemente escribo desde mi viviencia. Vine ha Madrid hace dos meses con mi novia, ambos argentinos, con la idea de realizar un estudio de postgrado o al menos vivir una experiencia distinta. Yo tengo doble nacionalidad, por lo que entre sin problemas con el pasaporte italiano. Mi novia está aun a la espera de su turno para poder tramitarla por lo que entró con un visado de estudios. Elegimos Madrid era una de las únicas ciudades donde se impartían cursos de postgrado que comenzarán en enero y mi novia tenía aquí una amiga que nos podía alquilar una habitación. Mi novia trabaja «en negro» enseñando el inglés. Soy abogado y no es fácil de homologar mi título por lo que termine trabajando de periodista en una revista hecha por y para inmigrantes latinos.
Ahora bien, veo que una gran parte de los mensajes que se publican en los foros o demonizan a España y los españoles o los ensalzan hasta el hartazgo. La realidad suele ser menos glamourosa, al menos mi experiencia lo es. España es un país europeo con un nivel de vida muy alto. Existe una demanda laboral importante y tanto si uno tiene papeles como si no los tiene consigue un puesto. Por supuesto que si se esta en situación regular será más facil encontrar un trabajo, que será mejor pagado y se desarrollara en condiciones superiores. Esto no significa que esten desesperados solicitando a los latinos que emigremos para aquí. Pero tampoco significa que nos excluyan de la vida laboral y social. Como en todos los países y me atrevería a decir como en todos los ámbitos sociales quienes ya se encuentran instalados recelan de quienes llegan por temor a perder su lugar.
En resumen, no veo que España sea mal destino para quienes quieran emigrar. Siempre es díficil empezar en un nuevo sitio, pero también lo sería para un rosarino si se fuera a vivir a Rio Gallegos para dar un ejemplo. Depende mucho de lo que uno desee y haga poder integrarse o no a la sociedad española. Los españoles tienen cuestiones ya saldadas que nosotros todavía ni siquiera estamos cerca de solucionar y otras que nosotros ya hemos superado. No creo que en principio sea demasiado díficil aceptar para un argentino las costumbres locales, porque son similares a la nuestras.
Quizás dentro de un tiempo cambie de opinión, pero por ahora me encuentro más que satisfecho con la vida en Madrid