María Cecilia Delfino, abogada y docente desde Toronto, Canadá

Toronto, Canadá

«Cuando uno deja su país y lo hace con mucha bronca, no hay lugar para el recuerdo»

Profesión: Abogada. Docente Universitaria.
Edad: 36 años
Ciudad/ País de origen: Argentina.
Fecha de salida: 19 de mayo de 2002.
Ciudad/ País de destino: Toronto, Canadá.

Testimonial de migración María Cecilia Delfino desde Toronto, Canadá

¿Por qué te fuiste de Argentina?

Porque tenemos cuatro hijos y, siendo profesionales, con mi esposo no podíamos progresar ni vivir en un país que brinda incertidumbre e inseguridad diaria sin miras de cambios.

¿Qué fue lo más difícil de la decisión?

Se nos hacía difícil la partida porque no contábamos con los medios económicos suficientes, ya que Canadá te exige una determinada cantidad de dinero por el grupo familiar, y al tener nosotros hipotecada nuestra casa no quedaba mucho margen de ahorro.

Ni hablar cuando vino la hecatombe financiera en diciembre del 2001 y el dólar pasó a costar 3 veces más.

¿Por qué seleccionaste Toronto como ciudad de destino?

Porque Canadá es un país que necesita inmigración, te permite acceder a la ciudadanía a los tres años y gozas de beneficios de todo tipo, entre los cuales está el sistema de salud y educación.

Además, te brinda la posibilidad de la estabilidad económica y la mira de progreso y mejor calidad de vida.

Describe los primeros tiempos

Hace pocos meses que llegamos y estamos fascinados con el país. A mi, particularmente, me está costando el idioma, aunque creo que tengo que darme un poco de tiempo. Hemos rentado una propiedad desde pocas semanas y nuestros hijos van a la escuela y tienen amigos. Disfrutamos muchísimo del lugar.

Describe tu situación actual

La prioridad por la atención de nuestros cuatro hijos es que mi esposo se ubique en su actividad (es Licenciado en Sistema), lo cual se está haciendo difícil porque piden experiencia local o americana.

En Argentina yo era docente universitaria en la Facultad de Derecho y ejercía mi profesión, pero, por el momento, por la barrera idiomática y la adaptación, veo difícil hasta por lo menos el primer año tener perspectivas de ingresar al mercado laboral canadiense.

Necesitamos también progresar económicamente y recuperar parte de lo que tuvimos que dejar en Argentina, en especial un auto, ya que es muy oneroso para nosotros trasladarnos en bus.

¿Te arrepientes de la decisión? ¿Qué harías distinto si pudieras repetir la experiencia?

No me arrepiento en absoluto, ni siquiera siento nostalgia por Argentina. Solo, obviamente, por los afectos. Pero cuando uno deja su país y lo hace con mucha bronca, no hay lugar para el recuerdo.

Lamentablemente, nos hubiera gustado venir con más dinero, pero gracias a Dios que pudimos salir del país con lo puesto, ni siquiera nuestra casa se pudo vender por la mala situación económica.

Hicimos todo lo posible para poder salir. Cuando empezamos los trámites para emigrar yo le dije una frase a mi esposo que proféticamente se cumplió: «el tema no pasa por irnos a Canadá, sino por poder salir de la Argentina».

¿Piensas volver a Venezuela?

Por el momento, ni en vacaciones. Solo deseo conocer este hermoso país y todos los lugares bellísimos que hay para recorrer.

Testimonio publicado al 12 de agosto de 2002

 

¿Quieres enviar tu testimonial?
Sigue las siguientes instrucciones, aquí>>