Bismarck
El estado de North Dakota (ND) se localiza en la región Medio Oeste, división Central Noroeste, en la Zona de las Grandes Planicies, con terrenos muy ricos para la agricultura.

North Dakota, estado de Estados Unidos – Emigrar y vivir en EE.UU.

Algunos de sus apodos son el “Estado del Jardín de la Paz” (“Peace Garden State”), por tener- en su frontera con Canadá- el famoso Jardín Internacional de la Paz; o el “Estado Siux (“Sioux State”), por la importante presencia de los indios de esta tribu en sus tierras.

Se sitúa en el puesto decimonoveno entre las entidades del país, por su superficie de 183.123 kilómetros cuadrados.

Bismarck

Bismarck se destaca como su capital y, entre sus ciudades más importantes, se reconocen Fargo, Grand Forks, Minot y Dickinson.

Tiene una pequeña población de 672 mil habitantes; pero únicamente 2,2% de ella desciende de hispanos o latinos. Como se ha señalado, otros pobladores importantes son los siux.

Clima de North Dakota

Por su localización en el centro geográfico de América de Norte, posee un típico clima continental con marcadas variaciones de temperatura anuales, diarias y durante el mismo día, con lluvias de ligeras a moderadas que tienden a ser irregulares en duración y cobertura.

Se registra una humedad relativa baja, con mucho sol y cerca de movimientos continuos de aire.

Economía de North Dakota

Su agricultura prospera gracias al cultivo de trigo, cebada y girasoles; producción de azúcar, miel y leche; y ganadería. Se han establecido industrias dedicadas al procesamiento de alimentos y la fabricación de maquinarias, así como a las telecomunicaciones, energía, minería y turismo.

Por su interés científico y turístico, cabe mencionar que los bisontes pueden ser vistos y fotografiados en muchas localidades alrededor de Dakota del Norte.

Igualmente, los restos de los dinosaurios encontrados en este estado se exhiben en varios museos. Entre estos sobresale el ”Museo del Dinosaurio Dakota”, seleccionado como uno de los mejores de su región, el cual ejemplifica, de una manera excelente, cómo los pequeños museos del oeste norteamericano honran su legado arqueológico.