Carolina Villa, bróker-publicista, desde Madrid, España

España

«Lo importante en el mercado laboral español se resume así: formación, actitud, ganas de hacer las cosas bien y crecimiento día a día».

Profesión: Bróker-publicista
Edad: 31 años
Ciudad/ País de origen: Caracas, Venezuela
Fecha de salida: 1ro de octubre de 2003
Ciudad/ País de destino: Madrid, España

Testimonial de migración Carolina Villa desde Madrid, España

¿Por qué te fuiste de Venezuela?

Me fui para seguir con mis estudios. Acababa de terminar la licenciatura en la universidad y quería cursar un máster. También anhelaba un cambio radical, pues me sentía muy mal por la situación que se vivía en Venezuela. De hecho, luché activamente contra la situación política actual y eso me enfermó físicamente.

¿Qué fue lo más difícil de la decisión?

Lo más difícil fue dejar a mis familiares, que son lo más importante para mí. No obstante, proseguir mis estudios y cambiar de país era algo que planeaba para realizarme como profesional. En suma, deseaba crecer y ver qué nuevos horizontes podía encontrar.

¿Por qué seleccionaste Madrid como ciudad de destino?

Mi interés era irme a Inglaterra, donde había estudiado inglés en 1999. Sin embargo, el máster que me atraía solo lo daban en España, país natal de mi padre. Por ello poseo la doble nacionalidad. Así que me informé por Internet de lo que debía hacer.

Organicé una agenda completa, acudí al consulado español para gestionar parte de la documentación que debía llevar como «española» residente en el extranjero y listo. Los trámites avanzaron con rapidez. Las páginas oficiales del gobierno español me parecieron interesantes y de mucha ayuda porque explican muy bien.

Para mí fue básico ese trabajo que llevé a cabo antes de partir. No me resultó nada complicado. También me guiaron correctamente en las instituciones públicas españolas a las que acudí y me informaron de todo en todo momento.

Luego es cuestión de ir andando y cerrando temas de estudios, pero en general el proceso fue sencillo porque me enteré de lo indispensable antes de venir.

Describe los primeros tiempos

Los primeros tiempos fueron muy buenos. Conocí gente española que me ayudó mucho, que me dio una mano cuando la necesitaba. Por esa razón, les agradezco a todos. Lo malo era la separación de mi familia, la distancia.

Sin embargo, la experiencia fue positiva: en las dos primeras semanas obtuve mis papeles y, también, conseguí empleo, me inscribí en el máster y meses después lo empecé. En síntesis, fue un comienzo maravilloso. Madrid es una ciudad señorial y de contrastes que me encanta.

Sus habitantes, en general, son simpáticos y alegres; pero, como siempre y en cualquier sitio, hay de todo. Mi experiencia es positiva, aunque reconozco que no he hecho muchos amigos permanentes.

Pienso que lo importante es la calidad y no la cantidad. Al fin de cuentas, los que tengo me apoyan y me aprecian de verdad. Así que ¿para qué más?

Describe tu situación actual

Como dije antes, encontré trabajo en las primeras dos semanas de mi llegada. Me eligieron entre otros españoles y una chica portuguesa, así que es incierto que haya discriminación laboral.

Al contrario, he hablado con gente de recursos humanos de varias empresas y, entre los extranjeros, los venezolanos estamos bien valorados por la formación que poseemos. Esto es lo importante en el mercado laboral español: la formación, la actitud, las ganas de hacer las cosas de la mejor manera y el crecimiento día a día.

Actualmente, abrí mi propia empresa y sin ningún problema. En esta nación, el que quiere trabajar, por cuenta propia o ajena, tiene su cabida. Si estás preparado, los límites te los pones tú. Eso sí, hay que esforzarse bastante, pues conseguirás en la medida de tu lucha.

Eso es válido aquí o en la China. Acoto, además, que he empezado de cero, traje poco dinero y necesitaba trabajar para mantenerme. Lo que hoy me pertenece lo he hecho aquí, sin más.

¿Te arrepientes de la decisión? ¿Qué harías distinto si pudieras repetir la experiencia?

No me arrepiento. Sería demasiado injusta si lo hiciera. Por eso no me parece correcto que, por un comentario negativo, la gente se haga una impresión equivocada de España o de Madrid, donde resido.

Aquí tengo todo, me he casado con un madrileño maravilloso, mi familia completa reside ya en estas tierras y mi padre está a punto de abrir su negocio. Así que, desde luego, repetiría la experiencia.

Les aconsejo, a aquellos que estén preparados, que vengan con sus papeles en regla y con ilusión y espíritu de lucha. Tienen un hueco en España, os lo garantizo, incluso hoy en día con la crisis.

¿Piensas volver a Venezuela?

Uno nunca debería decir nunca y no lo haré, aunque de momento creo que no volveré. Me duele sobremanera la situación de mi patria y lucho como puedo desde esta tierra para que ocurra un cambio, así como combatí incansablemente cuando estaba allá.

Aspiro a un país libre y hermoso, a pesar de que no viva en él. Espero que mi sueño se haga realidad y que mis hijos amen a Venezuela tanto como yo. Solo una última cosa: lamento que a algunos inmigrantes les haya ido extremadamente mal; mas conozco testimonios como el mío de otros muchos venezolanos, que están felices y satisfechos en España.

De ahí que sea injusto generalizar, porque -como dice una amiga que ha escrito antes en esta página-existen personas y cosas buenas y malas en todas partes. Les deseo la mejor de las suertes y ya sabéis “el que quiere puede”.

Testimonio publicado al 30 de septiembre de 2011

 

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