Somos EGOISTAS por haber emigrado? Tal vez si.

Dirigido especialmente a los venezolanos (como yo).

Ya es de todos conocidas las épicas batallas que libran miles de compatriotas contra las fuerzas represivas de Maduro. Ya van no se cuantos muchachos muertos.

Ver a esos muchachos y señores siendo perseguidos, apaleados, sometidos a toda clase de vejámenes, en absoluta desventaja, tragando humo parejo, arriesgando literalmente el pellejo y uno aquí en Canada, tranquilo, bien seguro en su casa, viendo todo por «Internet».
Hay algo de injusto en todo esto. Confieso que me siento «un poquito miserable» por no estar alla dando la batalla por la democracia.

Ya no estoy para tirar piedras ni para devolver bombas lacrimogenas ni para correr delante de policías, pero aun puedo participar en marchas, asambleas, como lo hice muchas veces desde 2001 a 2005.
Combatí al regimen. Marche hasta cansarme. Participe en asambleas de ciudadanos. Perdí el mejor empleo de mi vida (PDVSA). Perdí dinero. Perdí un carro. Pase necesidades.

Aun así, no dejo de sentirme EGOISTA por haber emigrado y dejarle «ese problema (restauración de la democracia)» a los que se quedaron. Y no solo por eso. Tambien por haberme «salvado» de los malandros, la hiperinflación y la catastrófica de escasez de alimentos, medicamentos y de todo.

No pienso regresar. No hay vuelta atrás. No tengo edad para «comenzar otra vez». Y los vínculos con Canada son fuertes, prácticamente vitales (salud y medicamentos). Ademas, mis hijos se adaptaron y tampoco quieren regresar.

Y sinceramente, me quito el sombrero antes esos venezolanos que le están echando un mundo combatiendo la satrapía. Mi mayor respeto y consideración, y mis mejores deseos hacia ellos.